Después de una larga batalla contra el plástico, parece que la pandemia ha hecho que muchos hayan cambiado su opinión sobre este material. La producción de productos médicos ha aumentado. ¿La razón? Satisfacer las demandas relacionadas con el brote del coronavirus.
Por un lado, la industria del plástico parece estar parada después de un 2019 poco alentador. La primera consecuencia de la pandemia fue el aplazamiento de varios eventos, como fue el caso del Chinaplas 2020, la cual se realizará en agosto, e Interpack 2020 que fue aplazada hasta principios de 2021. Asimismo, Antec 2020, la reunión de la industria más grande de EE.UU. del sector, se presentará solo de manera digital. Pero, por otro, el sector médico y de envases desechables se apresuraron a aumentar la producción.
Tal es el caso de Ineos, que envió a todo su personal a trabajar desde casa, pero los que deben permanecer en el trabajo, tienen que estar a un metro de distancia, de esta manera contribuyen a combatir la propagación del coronavirus.
Otro caso es el distribuidor de resina M. Holland, quien como empresa también permitió que sus empleados trabajaran de forma remota. Sin embargo, no han tenido que interrumpir su producción y, por lo tanto, no ha afectado su cadena de suministro nacional. Adicionalmente, están trabajando para solventar cualquier problema con los clientes que estén más afectados.
El caso de Italia es similar al de Inglaterra. Tanto Cannon SpA como Ekosystem srl siguen produciendo maquinaría, algunas incluso para China.
En los Estados Unidos las compañías siguen en operaciones. No solo han seguido entregando producto, sino que han establecidos protocolos de higiene y evaluando diariamente que no hayan contagios en las empresas. La prioridad es suministrar a empresas de atención médica y consumidores globales los productos de prevención de infecciones, para poder contrarrestar al virus.
Por ejemplo, la empresa Berry dijo en un comunicado de prensa que cambió la capacidad a su producción máxima de materiales para productos como toallitas desinfectantes para superficies duras, máscaras faciales, respiradores N95 y otras prendas de protección.
En Alemania, Plastifizierungstechnik GmbH está trabajando horas extras para producir equipos para hacer máscaras no tejidas de flujo fundido.
Sector automotriz
Uno de los problemas que se están anticipando es la interrupción en la cadena de suministro del sector automotriz por la propagación global del coronavid-19. Pero esta industria sabe de interrupciones por causas mayores, como lo fueron el terremoto y el tsunami que sufrió Japón en 2011 o el brote de SARS en China, en 2002. Estas situaciones han logrado la consolidación del suministro a través de red compartida por fabricantes mundiales de automóviles.