México está en camino de llevar a cabo una expansión significativa de su infraestructura industrial, con un ambicioso plan de sumar 30 millones de metros cuadrados de parques industriales para el año 2029. Este crecimiento responde a la creciente demanda impulsada por la relocalización de empresas que buscan aprovechar las ventajas logísticas y de costos que ofrece el país. Sin embargo, para alcanzar esta meta, será fundamental superar importantes desafíos en infraestructura carretera y energética.
El país, que actualmente cuenta con 80 millones de metros cuadrados de parques industriales, ha experimentado un crecimiento acelerado en los últimos años. Según Samuel Campos, director ejecutivo de Newmark Latinoamérica, el promedio anual de expansión de estos espacios era de 1.4 millones de metros cuadrados antes de 2021. Sin embargo, en 2021 esta cifra aumentó a 2.9 millones de metros cuadrados, y en 2023 alcanzó los 13.9 millones. Esta tendencia refleja el atractivo de México como un destino clave para la inversión industrial, especialmente con el auge del “nearshoring”, que impulsa la llegada de empresas extranjeras al país.
A pesar de este notable avance, México enfrenta importantes retos para acompañar el crecimiento de su infraestructura industrial. Uno de los mayores desafíos es la infraestructura energética. Campos destacó que la capacidad de transmisión eléctrica es insuficiente para satisfacer la demanda de las nuevas industrias que llegan al país. Si bien se han propuesto soluciones como la instalación de paneles solares en las instalaciones industriales, esta estrategia tiene limitaciones, ya que no cubre las necesidades energéticas de forma óptima. “El crecimiento acelerado demanda un enfoque integral que contemple tanto la generación como la transmisión eficiente de energía”, subrayó el experto.
El problema no se limita solo a la energía. La infraestructura vial también está bajo presión. El comercio entre México y Estados Unidos, uno de los principales motores de la economía nacional, ha crecido un 310% entre 1996 y 2022, mientras que la expansión del sistema carretero solo ha aumentado un 29% en el mismo periodo. Este desajuste entre la demanda y la capacidad vial está generando cuellos de botella en las principales rutas comerciales del país. Campos advirtió que la saturación de las carreteras representa un obstáculo significativo para el desarrollo futuro de los parques industriales y para mantener la competitividad del país como un centro de manufactura global.
Para garantizar que la expansión proyectada de parques industriales sea sostenible, será necesario realizar inversiones estratégicas en infraestructura, tanto a nivel vial como energético. Las autoridades y el sector privado deberán trabajar en conjunto para diseñar soluciones que permitan el crecimiento continuo de la industria sin comprometer la eficiencia logística ni la calidad del suministro energético.
En conclusión, mientras que México se perfila como un líder en la atracción de inversión extranjera para la creación de parques industriales, su éxito a largo plazo dependerá de la capacidad del país para superar los desafíos de infraestructura que enfrenta. La expansión de 30 millones de metros cuadrados para 2029 es una meta ambiciosa, pero alcanzarla requerirá una planificación meticulosa y una ejecución coordinada de proyectos de infraestructura clave.
Este proyecto no solo impulsará el crecimiento económico del país, sino que también reforzará su posición como un actor clave en el panorama industrial global.
